El estudio Norm Architects, que lleva trabajando los principios de contención y refinamiento desde 2008, ha creado para Expormim una colección de líneas puras con esa belleza cautivadora que caracteriza a los diseños clásicos.

La colección Cask se inspira en esas piezas de mobiliario clásico de forma redondeada que siempre han desempeñado un papel fundamental en la historia del diseño. Sólo hay que echar la vista atrás: nunca pasaron de moda. ¿Cómo iban a hacerlo? Es su sencillez justamente lo que las convierte en objetos icónicos. Es el caso de Cask, por ejemplo: por toda estructura dos sencillas circunferencias de rattan ensambladas. El minimalismo más sofisticado.

El objetivo de los diseñadores era “crear una familia de mobiliario de salón (un pequeño sofá y un sillón) con un diseño único, contemporáneo y muy cómodo.” Versátil, confortable y elegante, todos los ingredientes de un clásico. “Estamos convencidos de que esta colección va a despertar un gran interés”, afirman.

El dinamismo que las circunferencias brindan a la estructura queda suavizado por la sobriedad de la paleta de color aunque el amplio abanico de acabados disponibles tanto para el rattan como para el tapizado expande el horizonte de estas piezas de modo que pueden encajar en cualquier atmósfera contemporánea por seria o atrevida que sea.

Katrine Goldstein Directora general de Norm Architects

Norm Architects

Norm Architects se fundó en 2008. Realiza proyectos de diseño industrial, arquitectura residencial,  interiores comerciales, fotografía y dirección de arte.

Al igual que el bienestar humano, la esencia del trabajo de Norm Architects se encuentra en el equilibrio, entre la riqueza y la moderación, entre el orden y la complejidad. Cada proyecto, ya sea de arquitectura, interiores, diseño o dirección creativa, está impregnado de la misma cualidad intrínseca: una simplicidad que conlleva ideas mayores.

Guiados por el cuerpo y la mente, más que por las tendencias o la tecnología, sus proyectos exploran ideas que no sólo se ven bien, sino que también se sienten bien: La arquitectura se vuelve reflexiva, el minimalismo adquiere suavidad y la materia visual asume cualidades hápticas. Su trabajo es nítido y claro y exuda, tácitamente, su atención a la calidad, los detalles y la durabilidad.

Situados en una de las calles más antiguas de Copenhague (Dinamarca), respetan su contexto y se basan en las tradiciones del diseño escandinavo: la estética atemporal, los materiales naturales y la defensa de los principios modernistas de moderación y refinamiento. Sus proyectos exploran lo que realza los sentidos humanos, independientemente de las preferencias personales, y reducen los espacios, los objetos, las ideas y las imágenes a su forma más simple. Su experiencia consiste en encontrar el equilibrio, cuando no hay nada más que añadir o quitar.

Fuente: Expormim.