El inventor de la primera silla giratoria fue Thomas Jefferson, sí ese Jefferson, el que fuera tercer presidente de Estados Unidos. Corría el año 1775. Tomó una silla de estilo Windsor y conectó las patas con la base mediante un perno central de hierro de modo que el asiento girara sobre unas ruedecillas similares a las usadas en las ventanas de guillotina. Jefferson lo hizo con una silla de madera y Expormim lo ha hecho con una de rattan.
A partir de Huma, el característico sillón de concha envolvente diseñado por Mario Ruiz, han jugado con las diferentes posibilidades que ofrece, patas metálicas, sistema giratorio, patas de madera maciza, respaldo de espuma en vez de varillas de rattan.
Huma ha demostrado ser una pieza muy versátil: seis versiones diferentes surgieron del diseño primitivo, todas ellas capaces de integrarse a la perfección en los modernos ambientes de trabajo. Unas mantienen el respaldo de rattan original; otras lo sustituyen por una estructura interna de acero revestida de espuma exible de poliuretano moldeada en frío y posteriormente tapizada. Y, a su vez, se pueden combinar con patas de madera de haya, patas de acero o con una base giratoria.
