Punt Mobles presenta Coral, un concepto de mesa único con infinitas interpretaciones posibles. La elegancia y pureza de sus líneas dialogan con el lenguaje arty y el estilo orgánico del creador israelí, que ya había colaborado en 2016 con Punt Mobles. Es flexible, se adapta a diferentes usos y estancias (del comedor al despacho) y está disponible para pedidos a medida. Consta de patas de nogal en forma de tótem con pétalos y tablero ovalado o redondo, que se puede personalizar con diferentes formas y materiales.

«Como una semilla, Coral es un elemento que parece haber crecido de la tierra y se extiende como un ser vivo, una escultura visualmente cinética, una naturaleza en acción. Desarrollado geométricamente de forma similar a mi serie de esculturas Ghost, el pie de la mesa sostiene el tablero como si la anémona apareciera en su caparazón«, explica el diseñador y artista Arik Levy.

«Diseñé e imaginé Coral como una idea que pudiera transformarse y traducirse en múltiples productos que dieran al mercado la respuesta a los cambios y actividades actuales«, explica Levy. Las hojas o pétalos de coral que giran sensualmente alrededor de un centro desplazado interactúan con el espacio y leen la luz y la sombra en cada momento. Su estabilidad, debida a su perfecta geometría y construcción, permite un generoso espacio para las piernas del usuario, proporcionando comodidad visual y ergonómica y convirtiendo cualquier uso en un gozo y un placer perpetuos. Casi como en el arte abstracto, Coral permite ser todas las metáforas que puedas imaginar«.

Arik Levy

Artista, técnico, fotógrafo, diseñador, videoartista, las habilidades de Levy son multidisciplinares y su obra puede verse en prestigiosas galerías y museos de todo el mundo. Más conocido públicamente por sus esculturas -como sus emblemáticas piezas de Rock-, sus instalaciones, ediciones limitadas y diseño, Levy opina sin embargo que «el mundo son las personas, no los objetos«.

Originario de Israel y trasladado a Europa tras su primera participación en una exposición colectiva de escultura en Tel-Aviv en 1988, Levy trabaja actualmente en su estudio de París.

Fuertemente disléxico, el arte se convirtió en su medio de expresión. Su formación fue poco convencional, donde el surf y la pintura sobre tablas de surf como si fueran lienzos, así como su estudio de arte y diseño gráfico, ocupaban todo su tiempo en casa. Tras años de práctica, Levy decide cursar estudios en el Art Center Europe de Suiza, donde obtiene una licenciatura con matrícula de honor en 1991.

Tras una estancia en Japón donde consolida sus ideas, observando la cultura minimalista japonesa y su forma de vida, y asumiendo experiencias muy diferentes como la fabricación de productos y piezas para exposiciones, Levy regresa a Europa donde aporta su arte a otro campo: la danza contemporánea y la ópera a través de la escenografía y las instalaciones.

La creación de su estudio supuso entonces una incursión de nuevo en su primer amor, el arte y el diseño industrial, así como a otras ramas de su talento. Respetado por sus diseños de mobiliario e iluminación en todos los continentes, Levy también crea líneas de ropa de alta tecnología y accesorios para firmas del Lejano Oriente.

Arik Levy, que ahora se considera más un artista de la «sensación», sigue contribuyendo sustancialmente a nuestro entorno interior y exterior; su obra incluye escultura pública, así como entornos completos adaptables a múltiples usos. «La vida es un sistema de signos y símbolos«, dice, «donde nada es exactamente lo que parece«. Arik Levy es Caballero de las Artes y las Letras de la República Francesa.

Fuente: Punt Mobles.