El primer reto de este proyecto fue transformar un antiguo piso sombrío en una vivienda luminosa. El cambio de distribución y la nueva orientación de las zonas comunes que ahora atraviesan todo el piso, permite que la luz cruce de un extremo al otro. Los espacios en blanco como las zonas de paso y los salones fluyen por la vivienda invadiendo de luz cada rincón.

A lo largo de todo el piso se ha jugado con detalles dorados en elementos como lámparas, mobiliario y decoración. Estos detalles aportan un toque lujoso que combina perfectamente con la utilización de colores intensos y poco usuales, que se han aplicado de un modo muy rotundo en dormitorios, baños y cocina.

En el caso de la cocina se ha utilizado el color azul noche, que interrumpe y a la vez contrasta de forma drástica con el salón blanco de estilo más clásico.

En el caso de los dormitorios y los baños, también se ha seguido dotando a cada estancia de su carácter y personalidad gracias a los colores vivos, que conviven con el resto de elementos negros y dorados y consiguen que la experiencia en este apartamento sea irrepetible.

Proyecto: Miriam Barrio.
Terminado. 2017.
Superficie: 140 m2.
Ubicación: Carrer Aragó. Barcelona.
Fotografía: José Hévia.

Miriam Barrio

«Nuestra carta de presentación son la personalidad y el entusiasmo que le ponemos a cada proyecto. Nos esforzamos mucho en lograr una identidad propia para cada uno, creando diseños hechos totalmente a medida para ofrecer siempre algo nuevo y diferente en el ámbito del interiorismo, la arquitectura y el diseño en general.

Vivimos con pasión y cariño cada proyecto y todos se convierten en nuestros protagonistas. Somos capaces de enamorarnos de un espacio en blanco. Un suelo de madera nos habla de las manos artesanas que lo trabajaron. Y un techo alto nos recuerda que no hay retos imposibles. Para nosotros, cada pequeño detalle del espacio escribe una gran historia.»

Fuente: Miriam Barrio.