¿Cómo conseguir que una lámpara transmita la ligereza de una cinta que gira en espiral sin fin? La colección Piola, diseñada por Christophe Mathieu, trata justamente de imitar esta fluidez de movimiento infinito, que flota alrededor de la luz, en busca de un equilibrio entre la difusión de luz y la creación de sombras.
Un eje central formado por un tubo de metal sujeta más de 5 metros de cinta laminada en espiral que envuelve la luz, la protege y la tamiza para conseguir ambientes de confort y bienestar. Y es que en la Piola conviven varios tipos de luz: luz directa hacia abajo, indirecta por reflexión, y la que se cuela entre la cinta que ilumina el objeto en sí.
La forma en espiral de la pantalla rompe la monotonía del objeto, que cambia según el punto de vista en que se mire. El tubo central nos transfiere simetría y solidez que contrasta con la pantalla volátil y variable.
Disponible en 4 colores, tanto la estructura como la pantalla se ofrecen siempre del mismo color, y así la lámpara se percibe como un solo objeto. De este modo, por contraste, la luz adquiere mayor protagonismo.