Adriano Balutto, fundador de Studio Balutto, nació en Udine pero creció en Manzano, el corazón del Triángulo de la Silla, que más tarde se convertiría en el Distrito. Comenzó su actividad cuando esta zona contaba con una producción anual de más de 50 millones de sillas, casi el 80% de la producción italiana, el 50% de la europea y el 30% de la mundial. En este contexto, entrar en contacto con los artesanos, los fabricantes, los silleros, parece casi una obligación para Adriano que, de joven, anda siempre con el lápiz en la mano y la mirada atenta, empeñado en reproducir sobre el papel estilos, sillas, muebles... pero también el paisaje, la historia, los recuerdos y las emociones.
Su gran capacidad de diseño emerge, revelando una creatividad inagotable, mezclada con un profundo conocimiento de las técnicas de construcción y los materiales.
"Mi filosofía profesional responde a las necesidades de la producción y, siempre, a la lógica industrial: el mueble no puede ignorar las tendencias del mercado", recuerda Balutto.