La vivienda en su estado original era un loft diáfano situado en el centro de Madrid que fue construido a finales del siglo XIX mediante estructura de muro de carga, estructura de pilares de madera y forjado de bóveda catalana.

El proyecto se concibe como la construcción de una casa dentro de otra casa. Es decir, se parece más al proceso de construir una vivienda unifamiliar que al de una reforma interior, ya que tiene su propia estructura, cerramientos e instalaciones.

El espacio de la nueva vivienda se compone de 10 forjados situados a diferentes alturas que responden al nuevo programa demandado por el cliente, comprimiendo o expandiendo el espacio según la actividad a desarrollar.

Las diferentes alturas responden a los diferentes usos

Para la sujeción de dichos forjados se plantea una estructura de acero blanco completada por planos de madera de pino, que unas veces apoya en la estructura del suelo existente y otras, cuelga de la estructura vista del techo.

El volumen permite por lo tanto el desarrollo de actividades a diferentes escalas, ofreciendo espacios de intimidad y espacios grupales a su vez.

Los niveles o estratos muchas veces funcionan a modo de muebles que cambian el uso del espacio que generan, estando siempre vinculados por escaleras o por pasos cortos.

Los arquitectos querían que dicha estructura fuese lo más delgada posible por lo que tenía que ser metálica. La estructura es un perfil metálico lacado en blanco de 8x8cm con todas las instalaciones ocultas por dentro de la misma. El resto de materiales se escogieron para mimetizarse con parte del suelo de pino ya existente y el color blanco de las paredes.

Cristales de diferentes opacidades para conseguir privacidad

Los diferentes grados de privacidad de la vivienda se consiguen con los grados de opacidad de los cristales que sirven de cerramiento de dicha estructura, en su mayoría transparentes pero convirtiéndose en opacos o traslúcidos según la necesidad.

«Nuestra mayor fuente de inspiración para este proyecto ha sido arquitectónica, aunque siempre te fijas en muchos aspectos de tu vida cotidiana que te influyen, en nuestras referencias destaca la arquitectura japonesa de la actualidad«, nos cuentan los arquitectos de Zooco.

Proyecto:  JHouse.
Autor: Zooco Estudio. Miguel Crespo Picot, Javier Guzmán Benito, Sixto Martín Martínez
Colaboradores: Jorge Alonso, Teresa Castillo y María Larriba.
Construcción: Nimbo Proyectos.
Realización: 2018
Fotografía: Imagen Subliminal.

Zooco Estudio

Zooco es un estudio multidisciplinar de arquitectura, diseño e interiorismo fundado en 2009 por Miguel Crespo Picot (Santander, 1980), Javier Guzmán Benito (Santander, 1980) y Sixto Martín Martínez (Madrid, 1980), arquitectos por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid.

En la actualidad cuenta con sedes en Madrid y Santander, desarrollando sus proyectos tanto en ámbito nacional como internacional. Su trabajo durante estos diez años abarca más de 50 obras publicadas en medios especializados nacionales e internacionales, algunas de las cuales han sido reconocidas en diversos premios como los prestigiosos NAN Construcción 2019, EuroShop Retail Design Award ’18 Shanghai, International Design Media Award 2018 Shenzhen o Casa Decor 2013 y 2014.

Su filosofía consiste en abordar cualquier tipo de encargo, independientemente de su escala, presupuesto y programa, con la misma actitud y ambición creativa, aplicando un mismo proceso en busca de una solución apropiada y valiosa, tanto desde el punto de vista artístico como funcional. En un mundo tan cambiante y fugaz como el actual, buscan soluciones arquitectónicas y espaciales que aguanten el paso del tiempo, que perduren a través de la constante irrupción de tendencias y modas, fenómenos que provocan una caducidad inmediata de la mayoría de las propuestas creativas.

Fuente: Zooco Estudio.